DISEÑO DE PAVIMENTOS
El diseño de pavimentos se origina en la necesidad de brindarle a esta estructura, las características necesarias para que cumpla con su objetivo básico, cual es, proporcionar una superficie sobre la cual puedan desplazar personas, animales o vehículos, con un nivel de servicio adecuado, durante un periodo determinado, en condiciones seguras y económicas.
El diseño de espesores para pavimentos de adoquines de concreto ha evolucionado desde casi toda la existencia de criterios de diseño; antes de la década de los años 1970; hasta un amplio número de métodos de diseño disponibles en la actualidad, en su mayoría propuestos por instituciones dedicadas al desarrollo de esta tecnología en diversos países; varios de ellos en conjunto con centros universitarios.
Entre ellos pueden mencionarse: Interlocking Concrete Paving Institute – ICPI de los Estados Unidos; British Standard Institution – BSI (fundamento en el método del TRRL para pavimentos de asfalto).
Cada método de diseño tiene un mecanismo para las premisas de diseño y la obtención de resultados, además de una serie de consideraciones especiales en cuanto a casos específicos y manejo de variables locales
Esto hace que, aunque se parta de las mismas premisas (valores para la capacidad portante del suelo, el trafico y el periodo de diseño, el clima, etc.) los resultados sean; casi sin duda alguna, diferentes; reconociendo, unos u otros, como más conservadores o liberales, en general, o cambiantes con la evolución de alguna de las variables.
PARAMETROS DE DISEÑO
1—CAPACIDAD PORTANTE DE LA SUBRASANTE
La capacidad portante de la subrasante (terreno o fundación sobre el que va a estar apoyado el pavimento), se debe evaluar mediante ensayos de Relación de Soporte de California – CBR o del modulo de reacciones de la subrasante (K).
En última instancia, se puede utilizar el conocimiento que se tenga del tipo de suelo que la compone, expresado mediante la Clasificación Unificada o clasificación AASHTO.
En cualquier caso se debe evaluar la calidad del suelo, en todas las condiciones que este ofrezca y así obtener las cifras más exactas de esta variable, para llegar a un buen diseño.
Así mismo amerita saber que, la capacidad portante de la subrasante es lo que puede soportar ya sea tráfico o esfuerzos de diversa índole, un suelo determinado, sin manifestaciones de deformación ni desacomodos.
2 – TRAFICO
Junto con la capacidad portante de la subrasante, es otra variable principal que determina el espesor del pavimento.
Cada vehículo que circula sobre el pavimento le genera un daño a la estructura que depende de su peso, expresado como una serie de cargas de llantas (llantas sencillas o dobles) en una configuración determinada (ejes sencillos, dobles o triples).
El tráfico se determina mediante conteos directos o de estaciones fijas de una red, que establecen el número de vehículos, expresado como ejes de cada tipo, que circulan por el pavimento, en un determinado periodo (día, mes o año).
Con esta cifra se estima el tráfico total para cada eje que tendrá el pavimento durante su periodo de diseño (tiempo para el cual se espera que el pavimento prese sus servicios en condiciones satisfactorias.
El trabajo que va a tener el pavimento de adoquines, es determinante para realizar un buen diseño
El periodo de diseño debe ser determinado por el diseñador con base en: Los requisitos de la normalización aplicable y las consideraciones económicas, de mantenimiento y ambientales.
A pesar de la facilidad y economía que ofrecen los pavimentos de adoquines de concreto para su reparación y reconstrucción, se aconseja utilizar un periodo de diseño de 20 años, dado que no resulta practico ni lógico construirle sobre capas, como en los de asfaltos, sino retirar la rodadura y re conformar o acondicionar el nivel de la base. Sin embargo, se puede calcular el tráfico para periodos de diseño diferentes y con ellos el espesor del pavimento
El diseño de pavimentos se origina en la necesidad de brindarle a esta estructura, las características necesarias para que cumpla con su objetivo básico, cual es, proporcionar una superficie sobre la cual puedan desplazar personas, animales o vehículos, con un nivel de servicio adecuado, durante un periodo determinado, en condiciones seguras y económicas.
El diseño de espesores para pavimentos de adoquines de concreto ha evolucionado desde casi toda la existencia de criterios de diseño; antes de la década de los años 1970; hasta un amplio número de métodos de diseño disponibles en la actualidad, en su mayoría propuestos por instituciones dedicadas al desarrollo de esta tecnología en diversos países; varios de ellos en conjunto con centros universitarios.
Entre ellos pueden mencionarse: Interlocking Concrete Paving Institute – ICPI de los Estados Unidos; British Standard Institution – BSI (fundamento en el método del TRRL para pavimentos de asfalto).
Cada método de diseño tiene un mecanismo para las premisas de diseño y la obtención de resultados, además de una serie de consideraciones especiales en cuanto a casos específicos y manejo de variables locales
Esto hace que, aunque se parta de las mismas premisas (valores para la capacidad portante del suelo, el trafico y el periodo de diseño, el clima, etc.) los resultados sean; casi sin duda alguna, diferentes; reconociendo, unos u otros, como más conservadores o liberales, en general, o cambiantes con la evolución de alguna de las variables.
PARAMETROS DE DISEÑO
1—CAPACIDAD PORTANTE DE LA SUBRASANTE
La capacidad portante de la subrasante (terreno o fundación sobre el que va a estar apoyado el pavimento), se debe evaluar mediante ensayos de Relación de Soporte de California – CBR o del modulo de reacciones de la subrasante (K).
En última instancia, se puede utilizar el conocimiento que se tenga del tipo de suelo que la compone, expresado mediante la Clasificación Unificada o clasificación AASHTO.
En cualquier caso se debe evaluar la calidad del suelo, en todas las condiciones que este ofrezca y así obtener las cifras más exactas de esta variable, para llegar a un buen diseño.
Así mismo amerita saber que, la capacidad portante de la subrasante es lo que puede soportar ya sea tráfico o esfuerzos de diversa índole, un suelo determinado, sin manifestaciones de deformación ni desacomodos.
2 – TRAFICO
Junto con la capacidad portante de la subrasante, es otra variable principal que determina el espesor del pavimento.
Cada vehículo que circula sobre el pavimento le genera un daño a la estructura que depende de su peso, expresado como una serie de cargas de llantas (llantas sencillas o dobles) en una configuración determinada (ejes sencillos, dobles o triples).
El tráfico se determina mediante conteos directos o de estaciones fijas de una red, que establecen el número de vehículos, expresado como ejes de cada tipo, que circulan por el pavimento, en un determinado periodo (día, mes o año).
Con esta cifra se estima el tráfico total para cada eje que tendrá el pavimento durante su periodo de diseño (tiempo para el cual se espera que el pavimento prese sus servicios en condiciones satisfactorias.
El trabajo que va a tener el pavimento de adoquines, es determinante para realizar un buen diseño
El periodo de diseño debe ser determinado por el diseñador con base en: Los requisitos de la normalización aplicable y las consideraciones económicas, de mantenimiento y ambientales.
A pesar de la facilidad y economía que ofrecen los pavimentos de adoquines de concreto para su reparación y reconstrucción, se aconseja utilizar un periodo de diseño de 20 años, dado que no resulta practico ni lógico construirle sobre capas, como en los de asfaltos, sino retirar la rodadura y re conformar o acondicionar el nivel de la base. Sin embargo, se puede calcular el tráfico para periodos de diseño diferentes y con ellos el espesor del pavimento
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